domingo, 30 de agosto de 2009

¿Por qué?

Esa es la pregunta, y yo te daré las respuestas:

Porque me has hecho feliz cuando nadie lo hacía.
Porque me ayudaste a ver la luz a través de un tunel en el que solo veía oscuridad.
Porque, pese a todo, te quise, te quiero y te querré.
Porque nuestra amistad puede con todo, y con todos.
Porque nunca nadie pudo decirnos lo que teniamos y no teniamos que hacer.
Porque cada SMS recibido a las 23:00 de la noche me sacaba una sonrisa de la cara.
Porque ni la lluvia puede estropear algo bonito, y porque siempre habrá algun sauce bajo el que resguardarse.
Porque vivimos por horas.
Porque tengo claro que perdí un amigo, pero que he ganado otra mejor.
Porque me has demostrado cosas que otros no me han demostrado.
Porque me tienes que enseñar a patinar.
Porque...¿Qué sería yo sin tus paridas?
Porque logras sacarme una sonrisa cuando estoy mal.
Porque me encanta escucharte, y no quiero que digas que eres pesada, porque sabes que no.
Porque sí que estas cuando te necesito.
Porque siempre que huelo tu colonia me acuerdo de ti.
Porque eres mucho más que un simple contrato.
Porque tenemos la suficiente confianza como para haberlo firmado.
Y porque hay tantos porqués que no podría enumerarlos todos.


Y solo dos palabras pueden expresar lo que siento:

Muchas gracias