domingo, 30 de agosto de 2009

¿Por qué?

Esa es la pregunta, y yo te daré las respuestas:

Porque me has hecho feliz cuando nadie lo hacía.
Porque me ayudaste a ver la luz a través de un tunel en el que solo veía oscuridad.
Porque, pese a todo, te quise, te quiero y te querré.
Porque nuestra amistad puede con todo, y con todos.
Porque nunca nadie pudo decirnos lo que teniamos y no teniamos que hacer.
Porque cada SMS recibido a las 23:00 de la noche me sacaba una sonrisa de la cara.
Porque ni la lluvia puede estropear algo bonito, y porque siempre habrá algun sauce bajo el que resguardarse.
Porque vivimos por horas.
Porque tengo claro que perdí un amigo, pero que he ganado otra mejor.
Porque me has demostrado cosas que otros no me han demostrado.
Porque me tienes que enseñar a patinar.
Porque...¿Qué sería yo sin tus paridas?
Porque logras sacarme una sonrisa cuando estoy mal.
Porque me encanta escucharte, y no quiero que digas que eres pesada, porque sabes que no.
Porque sí que estas cuando te necesito.
Porque siempre que huelo tu colonia me acuerdo de ti.
Porque eres mucho más que un simple contrato.
Porque tenemos la suficiente confianza como para haberlo firmado.
Y porque hay tantos porqués que no podría enumerarlos todos.


Y solo dos palabras pueden expresar lo que siento:

Muchas gracias

¿y tú? ¿Qué es lo que deseas?

- ¿Qué es lo que deseas?
- Algo que esta fuera de mi alcance... ¿Y tú?
-Vivir, eso es lo que deseo.
-¿Acaso no vives ahora?
-Por eso. Con vivir es suficiente. Con sentir cada segundo de mi vida, cada momento al lado de la gente que quiero, con respirar aire cada mañana, me conformo.
-Es un deseo precioso...
-Lo sé. Porque lo demás, no me importa. El universo conspirará. ¿y tú? ¿Qué es lo que deseas?

jueves, 27 de agosto de 2009

Lo importante no es cómo amas, sino a quién amas

Es curioso que yo diga esto, que dejé de creer el amor en una temporada, pero es sorprendente que desde la última vez que escribí mi vida haya cambiado...
Y no sé si ha cambiado para mejor, peor, igual, o qué. Pero ha cambiado. Solo eso. Y me conformo con ello.

Y sí, piensas que eres inmune a todo, que vives en tu pompa, y te das cuenta que no, que pese a que sigues siendo un jodido cabrón de mierda, que sabes lo que haces y lo haces a sabiendas, tienes también un jodido corazón que no hace más que dar la lata... Y claro, toca cuestionarse cosas.

Pero esta entrada no es para hablar del corazón, ni de sentimientos, ni de nada de eso. Es para hablar de una forma de vida, un nuevo camino que recorrer, una nueva vía que seguir.
Me gustaría poder aplicarme la filosofía de vida que intento dar a los demás, la posiblemente mejor, la que me gustaría para que mi mundo,mis amigos, sean más felices. Pero no tiendo a pensar en mi mismo
¿Por qué?
Porque no quiero.
Porque es duro cuestionarte una y otra vez cosas que sabes que están perdidas, que no hay nada más que lo puramente real, y la realidad es así. Porque no sé como seguirá mi vida, como será mañana o pasado. Y ¿qué hago? Pues a vivir el presente.
Claro que sí.
Pero entonces viene ese Alberto, el idealista, el romanticón, el que escribía poesías y decía " yo siempre te trataré bien y te querré"
y se da cuenta nuestro gran cabrón de que ese Alberto debería estar sepultado, sí, bajo una gran capa de miedo e incomprensión, y que debería quedarse ahí calladito. Porque esta mejor a dos metros bajo tierra, la sociedad no te va a entender, al fin y al cabo.
A follar, y a callar.

¿Veis? Un gran gran cabrón.
Un cabrón, por desgracia, con sentimientos.



Vaya mierda de entrada. Pero al fin y al cabo es como soy, y a quién no le guste que no mire. Como tantas veces he dicho. Por lo menos me aplico alguno de mis ideales.




Ah! Por cierto, y por si alguién lo lee y quiere saber lo que significa el título de la entrada, que se limite a preguntarlo, y si realmente ese alguien vale la pena, se lo diré. Para que me conozca un poco mejor, solo eso.



Vaya desvarios que tengo yo a las 3 de la mañana...